viernes, 4 de junio de 2010

Marear la perdiz

Tener en vilo al tándem Gay-Nayim y a toda la afición del Zaragoza parece tan absurdo como carente de sentido. La mayoría asumía que ambos iban a continuar en el banquillo aragonés pero desde el club se empeñaban en darle largas al asunto. El recorrido de Agapito por los medios en esta última semana tan sólo apuntaba que él sería el máximo responsable de todo y que había tomado la decisión tarde. Prefiere un equipo mínimo para trabajar y tener la sartén por el mango, sin que nadie se salga del tiesto para que se asuman las responsabilidades con nombre y apellido. Pero el fútbol está sujeto a muchas variables que no se pueden controlar.

Que Agapito y Prieto salgan ahora a la palestra y hablen como nunca en los medios, con las peñas, los accionistas minoritarios y demás, sería rentable si hubiera algo más detrás del decorado. La realidad es que la crisis va a cerrar más puertas que antes, que el patrimonio deportivo del Real Zaragoza es mínimo (¿a quién podemos traspasar?) y que económicamente el club está sumergido en una deuda apabullante.

Así las cosas, fichar buenos futbolistas aunque sea para traspasarlos más tarde, parece una quimera. La colección de profesionales que han entrado y salido del club es muy numerosa (Víctor Fernández, Garitano, Irureta, Villanova, Marcelino, Bandrés y su consejo, Poschner, etc.) y cada vez se ha empobrecido más una institución que lo tendrá muy difícil para negociar su contrato televisivo y a la que le ha caído el golpetazo de la sentencia del TAS, que supondrá 13 millones más de desembolso por un jugador que apenas jugó y que se vendió a precio de saldo. Ya me dirá el bueno de Porquera cómo va a resolver el asunto de forma "amigable" con el equipo ucraniano si la ley le da la razón. ¿Va a cobrar menos a cambio de un apretón de manos? Nos parecía mucho seis, propusimos dos y el tribunal nos castiga con trece. Una operación cojonuda.

Una cosa es la política de transparencia y buena relación con los medios por la que parece apostar Agapito, y otra muy distinta, hablar sin decir nada. Por eso me parece poco rentable el silencio sobre la continuidad de Gay si no había algo detrás. Y ese algo, sería una contratación sorprendente, que ilusionara a la afición. En cualquier caso, si es así, también ha fallado. Otra vez como después del 6-0 en el Bernabéu.

No conozco a Prieto, ni tengo referencias de su anterior trabajo, ni he hablado con él excepto durante unos segundos en el área de Servicio de Logroño y en dos entrevistas telefónicas de compromiso, una el otro día y después de mucho insistir cuando estaba concedida y quería pasar de mi. Supongo que él no me conocerá tampoco porque hace poquito que está aquí, entre nosotros. Pero podía interesarse un pelín, que también forma parte de su trabajo, y le irían mejor las cosas. pardeza, por ejemplo, tenía más mano izquierda y un pasado mucho más glorioso y contrastado.

A partir de ahora, protagonizando el único caso de director deportivo que se sucede a sí mismo después de que le pusieran y quitaran de encima a un director general, él será el máximo responsable deportivo del club. Le deseo mucha suerte porque me gustaría disfrutar del Real Zaragoza y no sufrir por él; que llevamos ya varios años sin que nos llegue la camisa al cuerpo.